(Disculpandome por los horrores gramaticales propios de un aprendiz de escribidor)

Feb 5, 2010

Touch and go/ choque y fuga

Tras el timón de un moderno BMW color plata recorre el "zanjón" elaborando su estrategia de selección y enganche, Rodrigo organiza su tiempo e intenciones a la vez que supera una respetable cantidad de imprudentes choferes que dificultan su desplazamiento; un CD de jazz clásico retumba en sus oídos, la trompeta y voz de Louis Armstrong como relajante auditivo mitiga la tensión que propicia el caótico tráfico de nuestra ciudad.

N
o quiere perder mucho tiempo por lo que debe escoger solo entre las presentes, planifica no demorar mas de diez minutos en su inmediato destino. Sube por la entrada a Canaval y Moreira dobla en el puente del mismo nombre y se dirige rumbo al Percy´s, fenecido Night Club cuyo esplendor en la década de los setenta disfrutamos los limeños; cuadras mas adelante Rodrigo Bernandini se estaciona y baja.

Con notoria prestancia y firme paso se dirige hacia un conocido restaurante de nombre colonial, en los días de semana el bar del referido establecimiento es frecuentado por agraciadas empleadas, preciosas secretarias y pudientes funcionarias que trabajan en la zona financiera del distrito de San Isidro; después del horario de trabajo es el "point" obligado, punto de encuentro para socializar y... algo más.



Jacinto es un cholo fornido, experto albañil e impertinente seductor, siempre se mete en problemas por su incorregible espíritu de "macho cabrio"; en cuanta obra trabaja tiene un amor, sus compañeros le apodan "el marino" en alusión al amor que estos tienen en cada puerto.

Violeta es una charapita que trabaja en casa de los Gomez, lleva mas de cinco años con ellos y está a cargo de la cocina, su especialidad son los platos de su región, cada viernes prepara platillos de su tierra. En esos días ella debe ir caminando hasta el Mercado de Huiracocha en Jesus Maria para conseguir carnes, verduras y condimentos de la selva, productos que siempre deleitan a sus patrones.

La vio aproximarse desde la cuadra anterior, la esbelta silueta y vivacidad de la mujer selvática es un sello étnico irrefutable y reconocido, Jacinto como buen "picaflor" de inmediato se da cuenta e inicia su cacería, baja de un porrazo desde el cuarto piso de la construcción donde está trabajando, se ubica en el portón de ingreso y espera, Violeta mientras camina nota algo extraño en la obra pero no puede comprender hasta que pasa frente a la fachada, ve a este corpulento y sudoroso hombre que la acosa, comprende que es ella quien provoca el alboroto, mientras Jacinto le profiere a viva voz un par de groseros piropos ella intenta demostrar indiferencia pero sin querer acentúa su cadencia al andar y pronuncia los movimientos de cadera, se delata.



Rodrigo viste un impecable terno de corte italiano en color azul marino, su corbata y pañuelo de seda combinan a la perfección con la prenda principal, camina erguido sobre la ancha vereda dejando una sutil estela de lavanda importada. La mampara de vidrio del bar le permite observar como numerosas mujeres, en su mayoría jóvenes, conversan alborozadas degustando discretos piqueos y transparentes tragos; costosas, sugerentes prendas revelan sin disimulo los atributos físicos de estas selectas mujeres, sin inmutarse Rodrigo avanza mientras el bullicio del interior llega hasta sus oídos, su primera impresión es prometedora. Soltero, deportista, empedernido seductor y próspero empresario; una arrolladora personalidad, visible porte atlético y obvia elegancia le distingue, tiene fama y popularidad, además sabe utilizar estas cualidades para entablar nuevos contactos o negocios.

No presta atención ni se preocupa del término que ahora se utiliza, en él es natural, parte de su esencia personal, una formula que viene realizando por largo tiempo. Hoy lo que es habitual para Rodrigo está de moda, hasta tiene una definición especifica, expresa. La internet se ha encargado de popularizar el nuevo término según una dudosa clasificación elaborada y dispuesta por personajes anónimos, individuos sin nombre, reputación y probablemente con desconocimiento o inexperiencia en el tema, es que ahora los estereotipos o calificativos los dicta la red, las costumbres se instauran en países lejanos o direcciones electrónicas forasteras y generalmente con estándares foráneos, todos somos hoy una gran masa humana que solo escucha o lee, atiende, entiende y sigue esos parámetros sumisamente, con absoluta estupidez.




El cholo que es ducho en los avatares de seducción sabe que va a regresar y se mantiene atento, quiere completar su faena y agregar esta "jerma" a su lista, acomoda las bolsas vacías de cemento en el deposito de materiales para que sirvan de catre, si todo funciona como intenta hoy mismo será una más de su cuenta. Violeta hace tiempo en el mercado, después de sus compras aprovecha para ir al puesto de Sra Mabel, conocida peluquera oriunda de su región; allí con esmero cepilla su largo cabello mientras comenta sobre el reciente episodio con la dueña, acomoda su vestido para luego iniciar el retorno, ahora quiere lucir atractiva, mostrar sus curvas y formas, ser deseada o hasta poseída por este tosco macho.

Al acecho Jacinto espera en silencio, sus compañeros desde la azotea avisan sobre la proximidad de la charapa, el irrumpe en la vereda y se interpone obstruyendo su caminar, vuelve a lanzar palabrotas de conotación sexual, tomándola del brazo la jala, casi arrastra hacia el interior de la obra; ella simula rechazo pero facilita las cosas, ante los arrebatos de Jacinto se deja llevar mostrando una sonriente silueta e inexplicable silencio, apenas entran al deposito ella encara al cholo y se lanza sobre él, se cuelga del cuello y atenaza las piernas alrededor de su vientre, la disposición y entrega de esta mujer sorprende a Jacinto pero rápidamente reasume el control y levanta el vestido de la charapa.




Entra con elegante solvencia y raudo se dirige a la barra, pide una copa de pisco, seco y volteado para luego girar y mirar alrededor con sagacidad, quiere percatarse del ambiente además de hacerse notar. Mientras el barman prepara un trago más observa una rubia alta y delgada; atractiva, sensual aunque no muy joven, con asedio fija la mirada sobre ella, la observa con persistencia buscando su atención, rápidamente quiere conocer si ella muestra interés; no hay química, la chica devuelve la mirada entre confusa y aturdida. Rodrigo gira su rostro y sigue "oteando", casi al final de la barra hay una deliciosa jovencita de origen oriental, mirada dulce y marcado liderazgo, la disertación que pronuncia no solo capta la atención de su grupo sino incluye otras personas de la barra; luce discretos pero respingados senos, redondas nalgas pegadas a una ceñida falda y una delineada, minúscula cintura que realza su estupendo vientre. Otra vez la invasiva mirada de Rodrigo rompe distancias, esta vez ambos sonríen, él la saluda con un gesto facial y ella le ofrece un coqueto mohín que desnuda sus intenciones.

Al acercarse la aborda con un inocente pero decidido beso en la mejilla, quiere captar, conocer la verdadera disposición de esta gatita oriental, Lixue es mi nombre refiere ella justo cuando Rodrigo acerca su rostro al oido y murmulla jiāo méi, jiāo yàn, ella se sonroja y sonrie con una laxada expresión, unas cortas pero dulces palabras en chino fueron sufuciente argumento para desarmar y someter esta mujer.


No han pasado ni cinco minutos y Rodrigo ya tiene un proyecto viable, fluye la conversación entre ellos y conforme avanzan los segundo Lixue adquiere mayor protagonismo e iniciativa, ella propone salir del bar para ver, desde su elevada oficina la multicolor iluminación de los edificios en el centro financiero de la capital, está a solo dos cuadras y caminando se llega en tres minutos. Rodrigo calcula tiempos, no necesita definir nada, la seducción fue inicial como explosiva, la madurez e intenciones de ambos es clara y no exige mayor explicación.



En el trayecto Lixue transmite toda su sensualidad, derrocha elegancia y porte al caminar, Rodrigo disfruta observando la dulzura, pasión que irradia, en cada movimiento, con sus gestos, en la mirada.
Jacinto besuquea el cuello de Violeta, mete su lengua en el oido y gruñe con lascivia, levanta el vestido mientras la separa de él y con su mano, a la fuerza, le agacha la cabeza para que ella le haga una mamada, la charapita entiende y atiende al toque, arrodillada levanta la vista para cruzar sus miradas al mismo tiempo que abre y baja el pantalón con notoria habilidad.
La lujuria escondida que muestra Lixue, ahora sin temor ni vergüenza provoca en Rodrigo un semblante sereno, de plena satisfacción. Ya en el lobby del edificio, frente al ascensor, Lixue formula con marcada resolución pero sutíl frescura la expresión que Rodrigo esperaba, la que él con su actitud y comportamiento invitó e inspiró, la que de forma subliminal planteó desde el principio. Lixue al oido le susurra, solo es un touch and go Rodrigo.
Papito hoy vas a recibir lo que ninguna mujer te ha dado, el explosivo placer que solo una mujer de la selva puede ofrecer; eso sí, esto solo es choque y fuga, resopla Violeta sobre el pene de Jacinto.










7 comments:

Anonymous said...

Hola, interesantes tus relatos.

Tal vez te gustaría echar una mirada a mi pag:

http://www.sensualrubiblog.com/

Soy escort, y de vez en cuando realizo relatos de mis encuentros con clientes que me contratan.

Anonymous said...

Ashhh qué tonta esa no es, es esta:

http://lasdudasdeunaputita.blogspot.com/


Pasa que traía pegado ese enlace en la papelera porque es una chava que trabaja en lo mismo que yo y puse un enlace de su blog al mío. Bueno, si quieres visitas las dos, pero la mía es esta.

Carlos Caillaux said...

natalia, el acceso a tu blog es restringido, estas segura de haberme invitado??

Jorieta said...

Me encanto leer tu escrito Carlos, yo inicio unos pinitos escribiendo una cosa y otra.

Un saludo. Jorieta

Carlos Caillaux said...

Un placer Jorieta y gracias por la visita, pasaré por tu espacio a la brevedad.

Carlos.

Anuncios de sexo said...

Con una sencillez impresionante has conseguido dotar a tu blog de unos relatos increibles. ¿te presentaste al concurso de alice kram?

Carlos Caillaux said...

No amigo, disculpando mi ignorancia me puede ilustrar sobre el referido concurso. Gracias por la visita y seña.

Salud